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Cómo Paul Simon se convirtió en el único muchacho viviendo en Nueva York

Paul Simon y Art Garfunkel, dos judíos neoyorkinos de clase alta, se conocieron en el colegio. A mediados de los años cincuenta fundaron un dúo que llamaron "Tom y Jerry", nombre que respondía perefectamente a sus respectivas características físicas.

 A principios de los años sesenta, ya como "Simon & Garfunkel", sobrevivieron modestamente en el entonces hiperpoblado mundo de la música folk con mensaje. Fue a partir de la creación de la banda sonora de la película "El graduado" cuando alcanzaron el éxito, hasta convertirse en el dúo más importante de la historia de la música popular.

Las relaciones profesionales y sobre todo personales entre Paul Simon y Art Garfunkel siempre fueron complejas y difíciles. La parte creativa del dúo, el verdadero talento musical de la pareja, era Simon, algo que Garfunkel nunca asumió. La bellísima voz de Garfunkel compensaba su mediocridad como compositor, pero "Tom" nunca quiso quedar relegado al papel de mero instrumento musical al servicio de las ideas de Paul Simon.

 

En 1969 las relaciones entre ambos estaban ya muy deterioradas, y Garfunkel había decidido volar solo. Quería componer sus propias canciones y pensaba iniciar una carrera como actor cinematográfico. En agosto de ese año Art Garfunkel se fue de vacaciones a México, y ese viaje fue interpretado por ambos como un punto de no retorno en su relación. Sin embargo, aún tenían buen material al que dar salida juntos, y en noviembre de 1969 grabaron el LP "Puente sobre aguas turbulentas", el mejor álbum de su carrera. Roy Halee ofició una vez más como responsable técnico, y posiblemente como verdadero "puente" entre dos personas que ya nada tenían que decirse fuera de un estudio de grabación. En 1970 el dúo se separó de hecho, aunque no se anunció oficialmente su disolución hasta un año más tarde.

 

En "Puente sobre aguas turbulentas" hay una canción que sintetiza todo ese proceso de desencuentro, especialmente doloroso para dos personas que en el pasado habían compartido cuanto puede compartirse entre dos heterosexuales. Se llama "The only living boy in New York". El título hace referencia a la situación anímica que vivió Simon durante el verano de 1969, "cuando todo el mundo se fue de vacaciones a México", incluído Garfunkel, y él quedó en Nueva York, "único muchacho" viviendo en la megalópolis. Por lo demás, Simon le desea a "Tom" que tome su vuelo ya que "I know that you've been eager to fly now"; efectivamente, como decía antes, Art Garfunkel se había mostrado impaciente por "volar" por cuenta propia, abandonando el dúo.

 

En "The only living boy in New York" no hay amargura ni reproches. A la comprensión que muestra Paul Simon por la actitud de Garfunkel, se une la sensación de serenidad que transmite la instrumentación del tema: la introducción de un coro que subraya los fraseos de Simon, y sobre todo la aparición de un órgano profundo y parsimonioso, dan a la pieza un aire relajado y elegante. Aparentemente al menos, dos personas educadas, cultas y sensatas han decidido poner fin a una etapa de su vida personal y profesional rompiendo su asociación. Ambos lo viven como una liberación. Sin embargo, para Paul Simon esa soledad será la base de lanzamiento de su futuro éxito, en tanto para Garfunkel dará paso a una cadena de fracasos.

 Quizá Paul preveía lo que iba a suceder, y por eso, en vez de considerarse abandonado, se sentía casi feliz siendo "el único muchacho que vive en Nueva York".

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